Disimulando
Soy horrible haciendo pronósticos y planes. Decidí hace tiempo no hacer muchos. Mirar hacia atrás me sale un poco mejor, pero no tiene mérito. Tampoco me gustan las despedidas. Ni las bienvenidas. Nunca me gustó Nochevieja.
Así que he entrado en 2017 disimulando. Como quien no pasa de año.
A mi, con que vosotros continuéis estando ahí, me sobra.