Así es como veo yo la crisis: como el que tiene una gran herida després de sufrir un grave accidente.
Primero de nada, hay que cortar la hemorragia y vigilar sus constantes, ante todo, mantenerlo con vida. Sobrevivir. Después, mantenerlo estable y que salga de la gravedad. Saber que se curará. Pero, sin prisas, ya vendrá el momento de la rehabilitación, de avanzar poco a poco, ir aumentando las cargas hasta, por fin, pasado un tiempo, volver a la vida normal. Vivir.
Así estamos ahora. Con una gran hemorragia que, parecía cortada, pero aun sangra.
Por eso de aquello de la austeridad, de priorizar, de racionalizar: hay que sobrevivir.
Pero la pregunta clave es, una vez estables las constantes… ¿Acertarán con el tratamiento?