Es lo mejor que tiene estar iphonizado. Que lo tienes todo a mano. En el aparatillo hay una cámara más que decente. Y programillas de retoque fotográfico. Así que sólo tienes que estar pendiente de captar el momento. Y cuando llega, en un instante lo tienes todo. Click. Inmortalizado eternamente.
Por ejemplo, a tus sobrinos.