Muy cerca del Edificio Metro se ubica una cafetería que, hasta hace poco, tenía anexa (y al aire libre) un quiosco que, ahora ha sido sustituído por un solitario futbolín.
Aaaaaaay (suspiro largo), un futbolín…
Desconozco si los niños y adolescentes actuales, con tanta Wii, Fifa y Pro conocerán que existieron estos artilugios de futbol de andar por casa. No sé, pero lo que tengo seguro es que no se engancharían tanto como nosotros por escaparse a los futbolines (a partida de cinco duros) y montar grandes competiciones.
Somos esa generación del turco, de los billares, la canasta en el chalet, el pin-pon en el garaje, las bicicletas BH (yo no), la portería con dos chaquetas, jugar a pillar, hacer deditos-coditos-piececitos, montar cabañas con cuatro palos…
Cada día paso dos veces delante de ese futbolín solitario.
Ayer, por fin, vi jugando a una madre con su hijo.
CANCIÓN PARA ESCUCHAR: G. G. Penningstone (Sr. Chinarro – El mundo según)
Miope 
Una respuesta a “Futbolines”
Además en ese mismo hueco ponen en fallas y fiestas de guardar a una mujer a hacer buñuelo,…junto con el futbolín, o sea que huele a fritanga y si se escapa la pelota…