No soy de los que vive de recuerdos. Tampoco recorro el presente o pienso en el futuro recordando o comparando lo vivido anteriormente. Lo pasado, pasado está. Pero sí que es una clara evidencia que a todos nos encanta rememorar con añoranza los grandes momentos o las personas queridas. Además, recordarlo, sirve muchas veces para ayudar a vencer momentos tristes, porque uno se da cuenta de lo afortunado que ha sido y, sobre todo, que puede volver a serlo.
Para ello, Dios inventó las fotografías. A mí, me encanta tener fotos colgadas por todos los lados de mi habitación (y ahora del despatxet). Me hace gracia como cuando yo entro en casa ajena o alguien en mis dominios, todos nos fijamos lo primero de todo en los typical corchos con fotos. Por eso, hoy, no me digan el por qué, he decidido convertirme en guía turístico y transportarlos por las polaroids que ilustran mis recuerdos:
CORCHO ONE – MI CUARTO
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Arriba del todo, en plan funambulista, el grupete que fuimos a ver al Papa en Cuatro Vientos, el día que visitamos Segovia. Ya dentro del corcho, siguiendo el orden tradicional (izquierda-derecha, arriba-abajo): mi grupo de confirmación (Jordi, Ernest, Luis, Alex and company), la foto oficial de guapos de mi Santa y yo; los amigos y amigas del CEU en Notre-Dame; Inma y yo.
Abajo, les tres xiquetes (ya mujeres) de Alfafar; la foto de la cena del cumple de Gema con Gerardo, Elena, Miriam y Josema; una foto de Santiago’99 de Salva and me haciendo de Sants Patrons (la mismísima que nos hemos intercambiado millones de veces); megaabrazo a Lucas el día de su cumple, Mabel y un servidor.
Por debajo de nosotros, una de mi primer grupo juniors en Valencia y, justo al laíco, los 7 magníficos que decía David (Pascual, Molins, Alex, Javi, él, yo y falta Huiso) en una foto acrobática; ya en la última línea, Gema con ojos tiroidosos y nuestro sobri Pablo, la perspectiva de Marienfield, los compis de Monte-Sión en el viaje de tercero; Vanessa, María, Maribel y el resto de la pandi de amiguetes en Santiago; el grupete de Torremesí con el Arsobispo.
CORCHO TWO – EL DESPACHO
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Encuentro de españoles en Colonia; la entrevista de Canal 9 en el mismo lugar; les meues xiquetes junior; respons juniors de hace un par de años, todos con la camiseta de la 98.2; una grande hecha por Javi Ortí en el Monte del Gozo en el Camino del ’99.
Un escalón menos tenemos a los dos hermanos amb la Mare de Déu del Rosari en casa; haciendo el tonto en Vizcota; una desfilando en moros; Salva, Xavi y yo matando a la Peperra; y una de los famosos trols en Navarra (los 7 magníficos, Salva, Mari Chiu y el Chechu).
Si miramos para abajo encontraremos a los chicos de lapandilla de amigos de mi padre en la caseta de José Antonio; Gema (uyyy, perdón, mi Santa) y mi padre; mi abuelo y yo (digo abuelo, porque sólo conocí uno); la parejita en la colosal catedral de Colonia; Mari y J.R. el día de su boda; Benengeli y sra. Carles y sra. con el padre Cruz (oh sorpresa!!) en Marienfield.
Luego, en una fila intermedia, yo de peque pelirrojo; con mis primos en Marienfield (la de gente que pude llegar a ver pese al millonazo de personas); parejita y Riu Xúquer; ya en la última fila: hermano, papi, mami; los tíos paternos en una foto del año de la picor; y, un servidor, en una foto chulísima con un cirio en Colonia.
FUERA DE CORCHOS
No sería justo decir que por mi cuarto pululan entre estanterías y libros la foto con Quique González, los fundadores de la filà el orlín, una de peque en blanco y negro, Maribel y mi Santa juntitas; mi primer grupo de educadores, una con Ismael y Pablo Milvoces, una firmada de Adrian Ilie, y, por último, enmarcada, els Comilitons conquerint la Torre.
MORALEJA FINAL
Los recuerdos, recuerdos son, pasados están, pero me gusta pensar en ellos. Por suerte, la mayoría están en la cabeza, no en las fotos. Pero, éstas ayudan a recordar. Ah!!! Y si usted se siente ofendido por no salir en ninguna foto, piense, que es porque no tenemos aun ninguna juntos o en grupo chula. Me vienen a la cabeza alguna que otra persona que merece su lugar en el corcho.
Eso hay que remediarlo. Ya tiene una buena excusa para fotografiarse conmigo.

3 respuestas a “Polaroids”
Busca un sitio en el corcho para la foto de Gema con el coche nuevo!! Que se merece un pedacito de corcho!!
Sabía que no podía fallar en tu corcho. He contado que estoy al menos en cuatro de ellas. Falta la del pasillo en benagéber haciendo el muerto, chelo por el suelo y rosa corriendo cual alma que lleva el diablo.
En tres, creo. Lo de Rosita es «momento cinematográfico», lástima no tenerlo inmortalizado en fotografía, pero qué importa, lo tenemos en nuestra retina…