Estoy harto de pesimistas y apocalípticos. Cuánto más repitamos la palabra «crisis» más tardaremos en salir. Es psicología pura. Conspiraciones mundiales, la bolsa y tecnicismos aparte, es una cuestión de confianza. De querer arreglar las cosas. De ser productivos. De darnos cuenta que ahora es el momento de las oportunidades. Podemos salir.