San Cristòfol

valla

El jueves por la tarde, cuando bajaba de currar, por unos centímetros que no me atropella un coche en el cruce entre San Cristòfol y Obispo Benlloch. Lo peor de todo es que si me llega a pillar, el negligente era yo por cruzar por donde no me mandan (no hay paso de cebra) pero, lo más tronchante es que detrás mía, como piezas de domino, se hubiera llevado por delante dos abueletes intrépidos que también quisieron atajar por medio de la calzada. 

Ahora que pròximamente, Dios Mediante al Plan ZP, van a remodelar esta concurrida y estrecha vía torrentina, ojalá ocurran dos sucesos maravillosos:

– One) Que le gane espacio el peatón al coche.

– Two) Que se ordene la calle de alguna genial manera para que ese imaginario paso de cebra que todos cruzamos (que levante la mano quién no lo haga) exista de verdad.

Por pedir que no sea, oiga.

CANCIÓN PARA ESCUCHAR: Turnedo (Iván Ferreiro – Canciones para el tiempo y la distancia)

Deja un comentario