Miope

Ayer fui a echar unas foticos a la clausura de dos cursos TEFIL (formación para desempleados) en Aldaia. En el momento de la entrega de los certificados, uno de los asistentes del curso de pintor, al recoger el suyo (a gritos de «Torero, torero», por cierto) le espetó, ante todos, a la concejal de bienestar social un «¿Y, ahora qué hago con la crisis?» y, directamente, le cuestionó que pensaba hacer su Ayuntamiento por él.

Con todo el tacto del mundo, la regidora le recordó que era el gobierno central quien, realmente, podía hacer medidas fuertes ante la situación económica, pero que como ayuntamiento iban a pelear por fomentar el empleo y la reactivación económica dentro el municipio además de seguir formando a los desempleados como ellos para mejorar su cualificación de cara al futuro.

Como se pueden imaginar, el nuevo pintor no se conformaba con eso. Quería más: «Pues, ya ves, qué poco hacéis por nosotros, nos deberíais contratar a todos». La concejal, con más tacto aun que la primera respuestas y con todas las avergonzadas miradas puestas en ella, le recordó que «Ojalá, pero no olvides que tú también debes ayudar a eso, el Maná no baja todos los días del cielo, no podéis esperar siempre a que os lo traigan bo i fet hasta la mesa, hay que formarse y ganarse día a día ese trabajo que tanto necesitáis».

Cuando iba a llegar la nueva contraréplica, uno de los profesores atajó al protestón para impedir que su discusión acabara de cortar del todo la entrega del certificado, por lo que este último se marchó airado.

Lo de menos es la anécdota en sí, porque situaciones así se encuentran diariamente concejales de todos los pueblos y ciudades de nuestra España (camisa blanca de la esperanza), sino esa arraigada y erronea concepción del «bo i fet».  A mí que me lo den todo hecho, sin currárselo, sin ganármelo.

Así funciona gran parte de nuestra sociedad y así se refleja en muchos trabajos, asociaciones, proyectos… sólo funcionamos si nos lo dan todo, si nos dan la subvención, si tenemos la ayudita de la administración pública de turno. Y así vamos, poco a poco, perdiendo nuestro papel social de ciudadanos. Así, poco a poco, vamos bajando el listón de todo. Porque no nos exigimos nada. El mejor premio el que se consigue con menos esfuerzo.

Y así nos va.

Por cierto, no busquen al protestón en la foto. No se quiso fotografiar.

CANCIÓN PARA ESCUCHAR: Gentle Hum (Finn Brothers – Everyone is here)