Para aflojar este ambiente de mal rollo en Torrent con la venida de los Reyes Magos (que ya debían ser feos para que les dijeran tanto), saquemos nuestras sonrisas del armario (menuda frase más moña acabo de soltar) para, alucina vecina, escuchar esta travesura digna de Zipi y Zape que ayer descubrí gracias a Buenafuente:
Niño se pega a la cabecera de su cama para no ir a la escuela
Un niño mexicano de 10 años se pegó con un potente pegamento industrial para zapatos a la cabecera de su cama en la ciudad mexicana de Monterrey con la intención de hacer realidad el sueño de cualquier infante después de las vacaciones: faltar el primer día a la escuela.
«No sabía cómo evitarlo, y no sé cómo se me ocurrió, pero anoche me acordé que mi mamá había comprado un resistol muy fuerte (pegamento industrial), y pensé que si me quedaba pegado a la cama no me podrían hacer ir a la escuela», comentó Diego a la AFP.
Fue entonces que decidió «ir pa’ la cocina, donde mi jefecita (madre) tenía el resistol en la alacena, lo agarré y me lo puse en la mano», agregó. La mano de Diego estuvo pegada a la cama dos horas, durante las cuales su madre intentó despegarlo con agua, aceite y acetona, luego, los paramédicos de la Cruz Verde, elementos de Protección Civil del Estado y policías preventivos también trataron en vano de liberarlo.
El menor se negaba a decir el por qué de su sui generis decisión, hasta que finalmente soltó entre risas que «no quería ir a la escuela, no tenía ganas, estaban muy ricas las vacaciones». Finalmente un elemento de Protección Civil del Estado roció con éxito un spray llamado ‘afloja-todo’ en la mano del menor.
El intento del pequeño falló, porque fue despegado a tiempo para regresar a clases.
Ver para creer. Por cierto, ya que hablamos de Zipi y Zape, os dejo un video que nos lleva a nuestra más tierna infancia.
CANCIÓN PARA ESCUCHAR: Wild honey (U2 – All that you can’t leave behind)
Miope 