Conjunción astral

 

Hay pocos días al año en que se alinean los astros y las estrellas en una gran conjunción cósmica para que mi Santa y yo podamos almorzar juntos pese a nuestras obligaciones laborales. Es en esos días mágicos, únicos, cuando nos ponemos nuestras mejores galas, acudimos a un restaurante de lujo (llámese, por ejemplo, Santo Domingo) y compartimos unos de los más exquisitos placeres de la vida como es el acto de almorzar. La mejor comida del día.

La conjunción dura pocos minutos, más o menos, treinta. Luego, un beso fugaz y tú a Bostón y yo a California. A esperar que el destino nos vuelva a conceder una oportunidad parecida.

Por cierto, y sin que venga a cuento con lo anterior, me acabo de dar cuenta de que tengo 453 correos en mi buzón del yahoo y, de ellos, 174 de los chorras por leer. Y eso que lo consulto unas dos veces al día. Creo que le hace falta una limpieza y puesta a punto. Hace tiempo que lo tengo en mi libretita de cosas por hacer.

Hará falta otra conjunción astral.

PD. Acabo de darme cuenta que la foto que hoy nos ilustra es la misma que puse antes de que otra alineación intergaláctica fulminará el anterior «Código de Carles». Toquemos madera esperando que la foto no esté gafada. Por si acaso, me acabo de hacer dos copias de seguridad del blog.

CANCIÓN PARA ESCUCHAR: Déjame vivir con alegría (Grupo de Expertos Solynieve – Alegato meridional)

2 respuestas a “Conjunción astral”

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