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Serán cabrones, no se contentan con tener a Ronaldinho, Deco, Xavi, ganar la liga y la Champions. Que va, que va. Encima tienen a Oliver en su equipo. Acaparadores, avariciosos, abusones… Siempre quieren más. Pero, tiempo al tiempo. Cuanto más alto subáis más grande será la caída. Ya veréis. El que ríe último, ríe mejor. Algún día os volveremos a ganar y entonces no habrá quien pare la fiesta.
Por cierto, no penséis que me estoy volviendo loco. Que no, hombre, que no. Poned cualquier día La 2 de 14:00 a 14:30 y veréis como no miento. Oliver juega en el Barça. Que sí, que sí. Mirad y comprobaréis que echan «Campeones hacia el mundial», un remake de «Campeones» hecho por los autores que crearon «Campeones» (¿¿¿???). Mismo argumento, mismas caras, todo igual con la diferencia de que la serie continua y los protas se han hecho mayores fichando por equipos internacionales: Oliver por un tal «Catalunya» que juega de blaugrana y Mark Lenders por el «Piamonte» de rayas blancas y negras (la Juve, vamos). Qué fuerte. Hasta en los dibus siempre ganan los mismos. Qué injusticia.
Supongo que todos recordáis la serie «Campeones». Por los que sí y por los que no. Aquí va un pequeño resumen que he ido copiando y pegando de los montones de monólogos «tipo club de la comedia» que ironizan en otros blogs, que hoy estoy perro:
Futbolistas nipones: «Primer fallo garrafal de la serie ya que como todos sabemos los jugadores buenos de fútbol no están en Japón sino en España. ¡Ay! Perdón, que eso es lo que dice Míchel en cada partido de la selección, los buenos jugadores de fútbol suelen ser brasileños.»
Oliver: «Más que ir a jugar un partido parecía que iba a la guerra. Con un pie lesionado, el hombro también, se arrastraba por el campo y no consentía que el entrenador le cambiase. Parecido caso que Julian Ross, cada partido suyo era una lucha entre la vida y la muerte en la que el chaval estaba siempre al borde del infarto. ¿Pero qué clase de sádicos eran sus padres y el entrenador que lo ponía?».
Benji: «Benji era un portero chuleta, así como Cañizares pero aún da más rabia. El colmo del absurdo llegó el día que paró un balón con la gorra, de ahí que pensemos que sea de acero.»
Marc Lenders: «El antagonista, un chuloputas de barrio que iba siempre arremangado para enseñar musculito, el tío era capaz de chutar balones con una potencia increible con la que conseguía arrastrar jugador tras jugador del equipo contrario que apesar de sus intentos por parar el balón con el estómago (cosa bastante curiosa)»
«Ed Warner»: Un antiguo karateka que decidió hacerse portero de fútbol. ¿Por qué? Porque se liga más, está claro. ¿No habéis visto al Casillas como se le tiran todas las niñas?
Me cansé de copiar y pegar. Mañana más.
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Miope 