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Sí, sí, sí, ese soy yo. O al menos cuando poso delante de una cámara, porque he descubierto que no tengo casi una foto con una cara de chico serio o, al menos, de pose normal.
No soy el único que practico el divertimiento de poner caras raras ante la cámara (Xavi, Salva, Ximo Teller…), pero si un día te piden una foto sería, qué? Es lo que me ha pasado a mí.
Resulta que el martes me suena el móbil y veo que es Jesús Girón. Me pregunta si me importaría participar en un programa de radio de «Paraula» (periódico del arzobispado) sobre la Jornada Mundial de la Juventud de Colonia (Alemania) donde acudiré en agosto (bieeeeeeen). Evidentemente, no es problema, me paso el día hablando en la radio, así que un poco más… aunque, eso sí, ahora sería desde el otro lado de la acera (ups!!!). Se me hace raro.
La entrevista (via telefónica, porque paso de trasladarme a Valencia para cinco minutos) transcurre sin problemas, hablo como un campeón, diciendo lo que siento pero, como me sé los truquis, quedo como un joven comprometido, abierto, participativo, digo un par de frases de las que quedan de puta madre. La chica cuando acabo me felicita y me pide fotos para trancribirlo a la edición impresa.
Mi primera intención era enviar fotos de otra persona (mi idea era darles del Forner, Salva, Antonio o de my brother) para reirme un rato cuando se publicara, pero mi Santa me convence para que no sea malo.
Anoche, decidí buscar cuántas fotos tengo con pañoleta o de Madrid’03 y resulta que no aparecía ninguna digna. En todas aparezco haciendo el burro o con muecas excepto en un par. Jo. No me había fijado que era tan capullín delante de una cámara. Mi madre me lo dice constantemente, pero nunca le hago caso. No me sale seria la cara.
Les he enviado las formales, pero también les da guasa, por si cuela alguna…
Miope 